27 enero, 2020 10:54



Alerta

China intensificó los controles para evitar que el coronavirus se propague

China intensificó las medidas de aislamiento y de control para evitar que el coronavirus se propague. Según manifestó el presidente de China Xi Jinping, la situación es grave. En la ciudad de Whulan, corazón de la epidemia, se estableció una restricción de circulación. También habrá controles sistemáticos en los transportes de norte a sur. El virus provocó 41 muertes en China y hay 1.300 infectados. Y se expande por el mundo. Ya se registraron casos en Hong Kong, Australia, Francia y Estados Unidos.

Año nuevo sin festejos

China entró el sábado en el Año de la Rata, pero los festejos fueron mínimos y poco festivos. En las calles de Wuhan, una metrópolis de 11 millones de habitantes, no hubo petardos ni dragones. En los límites de la zona prohibida, a unos 20 km al este del centro de la urbe, los vehículos intentaban cruzar un peaje de autopista, pero tenían que dar media vuelta. «Nadie puede salir», repetía un policía. Desde el jueves, tampoco pueden partir de la ciudad trenes ni aviones.

Sin embargo el presidente chino se mostró optimista. «Mientras tengamos una confianza firme, trabajemos juntos -prevención científica y tratamientos- con políticas precisas, seremos, con seguridad, capaces de ganar la batalla», dijo Xi. Además de Wuhan, casi toda la provincia de Hubei está aislada del mundo. En total, unos 56 millones de personas están confinadas. En los pocos supermercados que quedaban abiertos, algunos ciudadanos trataban de conseguir mascarillas y productos desinfectantes. «La gente intenta protegerse», explicó un cliente, que se mostró tranquilo. «El gobierno se está encargando. No hay problema», sostuvo.

Los hospitales están saturados. El ejército envió el sábado a la zona prohibida tres aviones con 450 médicos y personal sanitario especializado. Algunos de ellos tienen experiencia en la lucha contra el virus del Ébola y el SRAS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo). El coronavirus es de la familia de este último, que entre 2002 y 2003 mató a 774 personas en todo el mundo. Los médicos militares trabajarán en distintos hospitales de la ciudad donde están ingresados numerosos pacientes con neumonía viral, precisó la agencia Xinhua.

Las imágenes de la construcción de un nuevo centro médico para un millar de pacientes ya están recorriendo el mundo. Las obras avanzan in extremis. Se espera que esté operativo en 10 días. El gobierno anunció que construirá otro hospital con 1.500 camas que estará listo en el sorprendente plazo de 15 días. Todas las víctimas mortales, salvo dos, fueron registradas en Wuhan o en la provincia de Hubei, grande como Siria.

Otra de las medidas anunciadas es la instalación de puntos de inspección en prácticamente todo el país. Los viajeros que presenten síntomas de neumonía serán «inmediatamente trasladados» a un centro médico, anunció en un comunicado la Comisión Nacional de Salud. Ya se pusieron a disposición para tal fin aviones, trenes y autobuses, según informó la Comisión. Muchos lugares turísticos, muy frecuentados, como la Ciudad Prohibida, partes de la Gran Muralla o el parque Disneyland de Shanghái, fueron cerrados para reducir el riesgo de contagio. A partir del lunes, las agencias de viaje chinas no podrán vender paquetes turísticos para grupos, anunció la cadena de televisión CCTV.

Hay cuatro estudiantes argentinos en Wuhan, recluidos por la cuarentena que afecta a la ciudad. Según informó el consulado argentino en China todos se encuentran en buen estado y no fueron afectados.

Un virus recorre el mundo

El virus se expande y ya está presente en cuatro continentes. Europa registró sus primeros tres casos el viernes. Todos son ciudadanos franceses que habían estado recientemente en Wuhan. La Comisión Europea (CE) convocó a reunirse el lunes a su Comité de Seguridad Sanitaria para debatir una posible respuesta al coronavirus. «Estamos listos para actuar e incrementar nuestra repuesta si es necesario», manifestó la comisaria europea de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides.

Por su parte, Australia confirmó cuatro infectados el sábado, también en personas que acababan de volver de China. En Hong Kong, donde hay cinco casos confirmados, se decretó alerta máxima, lo que implicó la postergación de una maratón y el cierre de las escuelas. Toda persona que llegue procedente de la China continental a este territorio semiautónomo tendrá que someterse a controles.

En Estados Unidos, donde se confirmaron dos casos, el presidente Donald Trump felicitó a Pekín por las medidas que puso en marcha para frenar la propagación del virus. “En nombre del pueblo estadounidense, ¡quiero agradecer al presidente Xi!”, escribió en Twitter el mandatario.

Estudios recientes informaron que la tasa de mortalidad de virus es bastante débil. El profesor Yazdan Yazdanpanah, experto francés de la OMS, que atendió pacientes en su país, informó que la tasa es del 5 por ciento. «De forma general, los pacientes afectados por el nuevo virus están en un estado menos grave que con el SRAS, que tenía una tasa de mortalidad del 9,5 por ciento”, explicó el profesor Yazdanpanah.