11 marzo, 2019 09:31



Asesinó al hijo que nunca reconoció, lo lincharon y quedó en terapia intensiva

Brandon Benítez tenía 18 años y «Traca» Cuenca lo ultimó de un disparo. Familiares golpearon al agresor, quien quedó al borde de la muerte.

Una tragedia familiar sucedió en la noche del sábado en una vivienda del barrio Kilómetro 6, en la zona norte de Concordia, donde un joven de 18 años perdió la vida como consecuencia de un disparo de arma de fuego que le efectuó su padre, quien nunca lo había reconocido legalmente como hijo, según informaron fuentes policiales al Diario UNO. Pero este era solo uno de los asuntos que motivaron las discusiones y peleas que se venían caldeando desde mucho tiempo atrás.

El episodio se registró en horas de la noche, cuando la familia se encontraba cenando en la vivienda ubicada frente a la placita del barrio. Alrededor de las 22.30 llegó al domicilio el hombre de 44 años, conocido como Traca Cuenca y comenzó a agredir verbalmente a los presentes. La discusión subió de tono y el sujeto sacó un arma de fuego, con la que amenazó con matar a todos. Primero le apuntó a su expareja, pero los hijos de la mujer salieron al cruce para defenderla.

En ese momento, cuando la pelea se había mudado a la calle, Cuenca levantó el arma, le apuntó a Brandon Benítez y disparó. El proyectil impacto en el pecho del joven, quien tardó pocos instantes en morir. Su padre no solo le había negado la identidad al nacer, sino que en la noche del sábado, le quitó la vida.

La furia se hizo sentir en el barrio, cuando muchos se acercaron a ver qué sucedía. Entre vecinos y familiares, entre estos otro hijo del agresor, comenzaron a golpearlo, y la escena se convirtió en un verdadero linchamiento. El peor golpe que recibió fue con una tabla en la cabeza, que lo dejó inconsciente.

El personal policial de la comisaría sexta, al ser alertados de la situación, llegó rápidamente al lugar, donde se encontraron con una persona malherida, tirada en la calle. A su vez, observaron un auto Corsa blanco, que funciona como remís, que se daba a la fuga. Por esto, se inició una persecución por algunas cuadras, hasta la vivienda de calle Nogueira, donde el vehículo fue ingresado. Allí detuvieron a un joven de 28 años, implicado en la reyerta previa. Mientras, en el lugar del hecho había varias personas que señalaban a los uniformados que el herido había sido el autor del disparo mortal.

Brandon ya había sido trasladado al hospital Masvernat, donde los médicos no pudieron hacer nada para salvarlo. Minutos después, ingresó en una ambulancia Cuenca, con severos golpes en todo el cuerpo y una fractura de cráneo, por lo cual quedó internado en la Unidad de Terapia Intensiva.

Los investigadores tomaron varias entrevistas en las cuales los testigos fueron contestes en cuanto a la dinámica del hecho tal como se informa. En la escena del crimen intervino personal de Criminalística, que levantó rastros de sangre en la vivienda y en la calle, y además tendrá la tarea de peritar prendas de vestir, el auto Corsa secuestrado y una vaina servida calibre 22 que fue hallada en el sitio, que sería del proyectil que impactó en la víctima fatal. Se presume que la pistola utilizada habría sido sustraída por alguna de las numerosas personas que participaron del episodio.

La Fiscalía imputó a Cuenca (lógicamente aún no de manera formal en una indagatoria) por Homicidio calificado por el vínculo, y ordenó la detención de dos personas por la agresión al hombre, quienes serán imputadas por Homicidio en grado de tentativa. Uno de ellos es hijo de Cuenca, y también recibiría la acusación con el agravante del vínculo, aunque como la situación familiar es demasiado compleja, esto aún está por verse.