3 marzo, 2015 08:34



Con una cámara oculta supo que la niñera maltrataba a sus hijos

Una pareja paranaense denunció penalmente a su niñera por maltrato; Una filmación muestra a la joven de 25 años agrediendo física y verbalmente a un bebé de un año y cinco meses y a su hermanito mayor de dos años y diez meses; La niñera, Hebe Yanet Mántaras, de 25 años, podría ir a la cárcel por maltrato infantil
Fue un vecino quien encendió el alerta. Así lo cuenta Cristela. Le dijo que escuchaba llorar a sus hijos cuando ella no estaba. La mujer no entendió a qué se refería, pensó que el vecino le reprochaba que sus hijos lloraban por hambre, lo atribuyó también a los berrinches del más grande, tal vez celoso de su hermanito.

Sin decir nada, su pareja, Alberto, bajó un programa de Internet y dejó la computadora encendida en modo de grabación. Quería registrar lo que pasaba en la casa cuando ambos salían a trabajar y los chicos, F. y S., quedaban al cuidado de una niñera.
Lo que descubrieron fue horroroso.

El video, que Alberto subió a su perfil en la red social Facebook, muestra a la niñera, Hebe Yanet Mántaras, de 25 años, golpeando al menor de los hermanitos, S., de un año y cinco meses, después de que el nene rompiera una goma espuma del asiento de su sillita de bebé y arrojara los pedazos al suelo.

Otros videos, que no han sido publicados pero que fueron entregados en sede judicial, muestran a la joven maltratando a los niños (física y verbalmente), negándoles comida o, directamente, ni siquiera prestándoles atención.

Las imágenes fueron registradas entre el viernes y sábado y el mismo 28 de febrero Cristela y Alejandro radicaron la denuncia por maltrato infantil ante el Ministerio Público Fiscal y en la Comisaría 4ª. El más pequeño de sus hijos fue revisado por el médico forense del Poder Judicial que constató las lesiones. Y también le enviaron un telegrama de despido con justa causa a la niñera, que aún después de todo seguía negando haber maltratado a los niños.

SHOCK. “No lo puedo creer”. Cristela repite varias veces la misma frase. “No lo puedo creer”, insiste. “Mis hijos son lo más preciado que tengo en la vida y no puedo entender que les pegara, estoy shockeada”, reitera.

Cristela y Alberto trabajan de lunes a sábado. Hace ocho meses contrataron a una joven de 25 años para el cuidado de sus hijos. “S. nació prematuro y se enfermaba mucho, entonces no quería que vaya a un jardín maternal; ella debía cuidarlo de mañana, entre las 8.20 y las 13.30 que volvía de trabajar”, contó Cristela. F., el más grande, iba a un jardín y solo se quedaba con la niñera los días de lluvia. También le pidieron que colaborara en las tareas de limpieza, sobre todo en los espacios por donde circulaban los pequeños.

La mujer cree ahora que “ella (por la niñera) era muy astuta y bajaba al más chiquito de la silla cuando estábamos por llegar; en ese momento cambiaba totalmente su actitud, los abrazaba, los besaba y el nene más grande parecía estar contento con ella porque la corría para que le diera un beso”, relató.

“Yo confiaba en ella en dejarle las criaturas; me la había recomendado una amiga y parecía una buena chica”, se lamenta todavía Cristela.

GRITOS Y GOLPES. Cristela y Alberto abrieron los ojos cuando un vecino les hizo un comentario. “Me comentó que escuchaba que el bebé lloraba por la mañana, que quizás era por hambre; yo no entendí lo que este hombre me quiso decir, pero en ese momento empezamos a sospechar que algo pasaba. Pensábamos que ella dormía hasta que el bebé se levantaba, pero no que los golpeara”, comentó la mujer.

Ella continúa con el relato: “Me sorprendía que S. todavía no caminara, solo gateaba y ahora creemos que es porque no lo bajaba de la silla. Incluso hace dos semanas, llegamos de trabajar y el nene tenía un golpe muy grande en la frente y ahora no sabemos si se cayó o si esta chica le pegó”.

Tras ver las filmaciones caseras, la pareja decidió inmediatamente radicar la denuncia, tanto en los tribunales como en sede policial.

“No quiero que ella cuide más chicos; no quiero que esto que les pasó a mis hijos les pase a otros; no quiero que la maten a palos, ni que le incendien la casa, ni que le hagan nada. Solo quiero que no cuide más chicos”, remarcó Cristela. “Si hay algo bueno de que todo esto salga a la luz es que sirve para informar y que la gente tenga cuidado y controle a quién mete a la casa para cuidar a sus hijos”, recalcó.