22 julio, 2019 09:25



QUIEN GANA: FERNANDEZ o MACRI

Unas veinte encuestadores ya han publicado en los principales diarios nacionales las tendencias para las elecciones. A 21 días de las PASO. Un resumen completo y variado repasa las siguientes dudas ¿polarización? ¿Cómo está el escenario entre los Fernández y Macri-Pichetto? ¿Puede crecer Lavagna? ¿El balotaje delanta la primera vuelta? ¿Hay un voto oculto o verguenza que no sale en los sondeos y esconde alguna sorpresa?

Las encuestadoras son Mariel Fornoni (Management & Fit), Federico Aurelio (Aresco), Sergio Berensztein (Berensztein), Hugo Haime (Hugo Haime & Asociados), Analía del Franco (Analía del Franco Consultores), Lucas Romero (Synopsis), Pablo Mandia (Analogías), Juan Mayol (Opinaia), Nicolás Solari (Real Time Data), Celia Kleiman (Polldata), Gustavo Marangoni (M&R), Raúl Timerman (GOP), Jorge Giacobbe (Giacobbe & Asociados), Gustavo Córdoba (Gustavo Córdoba & Asociados), Facundo Nejamkis (Opina Argentina), Federico González (Federico González & Asociados), Martín Romeo (SOLO Comunicación), Martha Reale (RDT), Pablo Romá (Circuitos), Facundo Mordasini (CIGP) y Sebastián Lopes Perera (Marketing & Estadística)

, Otros trabajan para inversores como Synopsis y Opinaia

Los puntos en común de la mayoría son

1) La elección se  polarizó y posiblemente en las PASO, entre el kirchnerismo y el macrismo sumen 80 puntos o más.

2) Alberto Fernández se mantiene arriba en intención de voto aunque el escenario está abierto. Los que más distancia les dan a los K hablan de 10 puntos. Los que mejor performance ven en el Gobierno hablan de empate.

3) Roberto Lavagna no levanta por ahora, perjudicado por la grieta.

4) Si se mantiene la tendencia, se adelantarán las decisiones. Las PASO serían una suerte de primera vuelta y las generales, una especie de balotaje. Así, o Fernández o Macri podrían quedar consagrados en octubre.

5) voto vergüenza o voto oculto, ante la polarización y la paridad, cualquier movimiento de este tipo, por más que sea menor, puede resultar decisivo.

Mariel Fornoni (Management & Fit) dice:

«Nosotros tenemos un escenario muy polarizado y bastante parejo, con una diferencia de casi 2 puntos, por encima los Fernández. Pero si uno mira la evolución, tuvimos 9 puntos en mayo, bajó a 5 puntos en junio, y bajó a menos de 2 puntos en julio».

«La campaña de Macri parece mucho más cerrada y consolidada que la de Alberto, donde son todos como candidatos que se están conociendo, que no han hecho campaña juntos y que de alguna manera están viendo cómo la hacen. De todas maneras hay que ver si el Gobierno puede mantener la economía con expectativa o no».

«Creo que puede haber un voto vergonzante y ese voto vergonzante te diría es más para Cristina que para Macri, porque es más terrible pensar que avalás la corrupción a que avalás una mala gestión económica. Otro tema clave que tiene que ver con Lavagna: nosotros lo tenemos en 7 puntos. El tema es que si saca más de 10 hay segunda vuelta».

«También habrá que ver el nivel de participación por región. Las encuestas se basan en una muestra homogénea, donde todos los sectores de la sociedad geográficos, etarios, socioeconómicos y demás están en la proporción que se representa en la muestra. Pero por ejemplo, si vos tenés la Ciudad de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe con una asistencia de 60% y en el interior de 80, eso te cambia la perspectiva. Y eso es bastante difícil de predecir, sobre todo porque mucha gente en las PASO siente que no se dirime nada».

Federico Aurelio (Aresco) – principal encuestadora del Gobierno- 

«Estamos viendo un escenario muy polarizado, previendo una polarización de 12 puntos más que la Primaria 2015 entre el Frente de Todos y Cambiemos. Lo cual no deja de ser una situación paradojal, porque después del desgaste que tuvo el macrismo en estos cuatro años y el desgaste que sigue arrastrando el kirchnerismo en 12 años de gestión, en lugar de haber mermado su apoyo o su caudal electoral, les ha permitido tener una polarización mayor que la de 2015».

«Nosotros observamos una diferencia que denominamos intermedia a favor del Frente de Todos, si bien no es lo suficientemente grande para considerar que ya ganó, tampoco es lo suficientemente chica para que Cambiemos considere que la va a remontar sí o sí».

«Lo más importante a tener en cuenta es que pequeños movimientos de esas diferencias pueden generar un impacto muy distinto. Es decir, una diferencia de 4 o 5 puntos es una diferencia que no define el escenario electoral a favor del Frente de Todos; ahora, si esa diferencia tiene un crecimiento de 3 puntos y en vez de 5 es de 8, va a ser una diferencia que difícilmente pueda remontar Macri y que va a generar un impacto muy negativo en el mercado y en un porcentaje importante de la sociedad argentina. En cambio, si esa diferencia en vez de 5 es 2, va a ser una señal de que Cambiemos está plenamente en carrera y puede repetir el camino que hizo en el 2015».

«A Lavagna en la Primaria lo vemos prácticamente invisibilizado, difícilmente pueda tener un gran movimiento a no ser que encuentren alguna genialidad de campaña».

«Hoy no estamos observando un voto oculto, como cuando nadie reconocía que había votado a Menem para su segundo mandato. El tema es que si aparece sorpresivamente un resultado que no pudo detectar ese voto oculto, por más que sea de bajo caudal, dos o tres puntos, pueden cambiar fuertemente el impacto de la elección».

Sergio Berensztein (Berensztein)

«El escenario está más polarizado de lo que por lo menos eran las principales hipótesis hasta hace un mes, mes y medio. Y puede haber sorpresa. En primer lugar hay que ver el nivel de participación y sobre todo entender no solamente el caso de Lavagna, sino también otras fuerzas que en principio podrían tener algún potencial, sobre todo en sectores jóvenes, como es el caso de Espert; también hay que ver cuánto resiste la izquierda».

«Otra hipótesis que hay que ver es si la cuestión pañuelo verde-pañuelo celeste tiene algún impacto en la intención de voto. También, la cantidad de gente que vota en las PASO. Temas que por ahí no son tan visibles en términos de la polarización, pero que por debajo pueden estar generando alguna dinámica en la opinión pública».

«En término de voto oculto, la verdad es que no hay evidencia en términos cualitativos ni cuantitativos. Tampoco voto bronca, algo que era bastante evidente en la elección octubre de 2001».

Hugo Haime (Hugo Haime & Asociados) Haime  mide para la campaña FERNANDEZ

«Esta elección tiene muchos interrogantes aún. Uno es cuál va a ser el grado de participación en las PASO. Está claro que los núcleos duros que apoyan al Gobierno y al Frente de Todos son los más proclives a ir a votar en el primer turno, pero en el medio queda más de 40% del electorado que toma la decisión de concurrir a votar a último momento, sobre todo en las primarias».

«La elección tiende a la polarización pero no creo que ello ocurra totalmente en las PASO.  Hay un sector del electorado que no quiere votar ninguno de los dos polos y se va a encontrar con la posibilidad de votar por preferencia y no por opción. La probabilidad de polarización plena la veo para la primer vuelta».

«El otro interrogante es qué sucederá en la Provincia. De lo que suceda en ese territorio depende en gran parte el resultado final nacional. Y es un tema difícil de dilucidar mediante el método tradicional de encuestas».

«Creo que el Gobierno necesita remontar una situación no cómoda y que corre de atrás. Por eso ha lanzado una campaña destinada a acortar las diferencias que la oposición le llevaba al iniciarse la campaña. Aunque parezca poco tiempo, tres semanas son tiempo suficiente para que las brechas se agranden o se achiquen y aún pueden pasar muchas cosas que modifiquen el panorama electoral. Me parece temprano para definir números precisos».

«Puede haber sorpresas en relación al clima que se esta generando de que todo esta empatado. En este sentido pienso totalmente distinto a los que postulan la idea de la espiral del silencio (el supuesto de que la gente se sube al carro ganador influida por los medios). Hay que pensar también que la gente desinteresada en la política es reacia a contestar encuestas. Allí hay una parte importante de votantes potenciales de Lavagna y Espert que pueden no estar contestando encuestas hoy».

Analía del Franco (Analía del Franco Consultores) otras de las consultadas por FERNANDEZ-FERNANDEZ.

«El escenario electoral efectivamente se ha polarizado. Entre otras cosas porque en el humor social se mantiene ‘el modo grieta, y por los propios movimientos de armado de listas que llevaron a cabo las dos principales fuerzas Y es la propia polarización la que lleva a que las diferencias entre los principales espacios se acorten, si bien la fórmula Fernández Fernández es la que mantiene el primer lugar».

«Se observa una franja del electorado que está más escéptica, que por el momento no opta por ninguna de las dos fórmulas de la polarización y constituye una oportunidad para las terceras fuerzas». «Pero también es un segmento que está más enojado que el resto con la política. Por lo tanto se torna resistente a la seducción por parte de los candidatos, con la probabilidad de que finalmente no vayan a votar el 11 de agosto».

«Más que un voto oculto, lo que se percibe, excluyendo a los núcleos duros de cada espacio, es un votante ‘vulnerable’ o lo que se denomina habitualmente ‘voto blando’ que es hoy el blanco de las campañas. Es aquel votante que a diferencia de los escépticos han decidido su voto con bajo nivel de convencimiento. El que logre revertir estos votos para sí, se verá fortalecido».

Lucas Romero (Synopsis)

«El escenario se ha venido polarizando de la mano de la desarticulación de una oferta de centro competitiva, y se puede ver reflejado en el incremento simultáneo en la intención de voto de los dos principales frentes electorales, que de manera combinada, pasaron de tener 64,7% de la intención de voto a tener 78,7%. Si proyectamos que parte del 4,9% de indecisos que reflejó nuestro último estudio pudieran ir a esos dos espacios, muy probablemente ambos espacios recojan más del 80% de los votos en la Primaria, algo que no se veía en la Argentina desde el 86,7% que sumaron la Alianza y el Peronismo en 1999».

«Pero el crecimiento de los dos espacios no ha venido mostrando la misma dinámica, ha venido creciendo más fuertemente el frente oficialista lo que le permitió ir achicando una diferencia que en abril era de 7,1 (para un escenario de competencia entre Macri y CFK), y que en nuestro último registro del 16 de julio, ya con las fórmulas confirmadas, es de 2,5, emparejando más la disputa».

«Teniendo en cuenta que estamos en un escenario donde la polarización probablemente esté produciendo definiciones de los votantes sin demasiado convencimiento, es decir votantes que se terminan inclinando por una u otra opción más por rechazo que por adhesión, no es descabellado pensar que cualquier evento relevante de aquí a la elección pudiera hacer cambiar de opinión a esos votantes».

«Puede haber voto vergonzante hacia ambas ofertas políticas. Hay que entender que el proceso de polarización ha producido un proceso de ‘balotajización’ del escenario electoral, donde los comportamiento de los electores tienden a tener más una lógica de balotaje que de Primaria o Primera Vuelta».

Pablo Mandia (Analogías)

«Los estudios de esta semana confirman la híper polarización: 80 puntos es un piso y es probable que entre Alberto Fernández y Macri lleguen a 83 u 85. Nuestros estudios indican que esto último es altamente posible, y que hoy se plantea una diferencia de Alberto Fernández sobre Macri de 4 puntos».

«Conforme vemos una profundización de la polarización, que incluso se infiere como la estrategia común del oficialismo y de la oposición que encarna Alberto Fernández, a priori parece difícil que asome una sorpresa por el estilo. En ninguno de los estudios Lavagna supera los 8 puntos, y no vemos una distancia mayor a los 5 (entre Alberto y Macri)».

«Hay dudas sobre un eventual ‘voto oculto’, porque hasta hace unos meses era una constante encontrar un tercio de los consultados en esta posición de rechazo a ambas candidaturas. Sin embargo, hoy ese espacio aparece licuado en las encuestas en el marco de la polarización. Dado que es una constante que casi 1 de cada 4 votantes definen su voto en la última semana, no podemos descartar que ese ‘voto oculto’ exista, pero tampoco podemos afirmar -por su propia naturaleza de oculto- que ese voto se sesgue especialmente hacia alguna de las opciones electorales vigentes».

Juan Mayol (Opinaia)

«Por lo que vemos en las últimas mediciones todo indicaría que se profundiza la polarización. Observamos una recuperación de ciertas variables del Gobierno como consecuencia de la estabilidad cambiaria: imagen presidencial, evaluación de gestión y expectativas de que la economía mejorará en el futuro. Esto impacta en una incipiente recuperación de la intención de voto del oficialismo, que ante el estancamiento de la fórmula Fernández-Fernández, se traduce -aún con cierta ventaja de la oposición- en un escenario tendiente a la paridad».

«Parece difícil un crecimiento de un tercer espacio, pero todo dependerá del comportamiento del 12% que (en nuestros estudios) aún se manifiesta indeciso, segmento refractario tanto al oficialismo -por decepción- como al kirchnerismo -por aversión-. Ese voto puede inclinarse tanto a Lavagna como a Espert, o bien retornar a Cambiemos».

«En un contexto de crisis económica y de una gestión gubernamental mal evaluada en ese plano, lo que puede observarse es cierto voto oculto hacia el Gobierno. Por la crisis, el votante kirchnerista siente que su momento para expresar su opinión con mayor legitimidad, mientras que los núcleos mas afines del Gobierno se mantienen con una actitud mas silenciosa».

Nicolás Solari (Real Time Data . R.T.D.)

«Estamos en camino a la elección más polarizada de este siglo. Si uno mira la historia electoral del país es fácil distinguir un periodo de alta polarización -que coincide con el bipartidismo clásico que imperó pos restauración democrática- y un ciclo más reciente de polarización moderada -que coincide con el bipartidismo atenuado de 2007, 2011 y 2015-. En el primer ciclo la polarización promedió el 86%, mientras que en el segundo estuvo en el orden del 70%. Para las PASO creemos que el caudal conjunto de las dos principales fórmulas pueden estar arriba del 80%».

«Me parece que la gran sorpresa de esta elección es tener un oficialismo muy competitivo tras casi 18 meses de declinación económica. El escenario habla a las claras de las limitaciones de la oposición para construir una oferta novedosa, atractiva y convocante, y también de la habilidad del macrismo, al que muchas veces se lo ha acusado de no saber hacer política».

«En líneas generales no creo que exista un voto vergonzante porque tampoco existe un clima dominante de cuál sería un voto aceptable y cuál no. Sí creo que el alto rechazo hacia los principales candidatos puede hacer crecer el voto blanco y los niveles de abstención».

Celia Kleiman (Polldata)

«Hoy se visualiza un escenario totalmente polarizado entre la fórmula de Alberto y Macri, en la medida en que estas dos figuras son las únicas opciones reales de ganar la próxima elección presidencial».

«Con respecto a si están parejos, yo prefiero hablar de escenario abierto porque en base a las encuestas y a la metodología con que se vienen realizando está dando una diferencia muy
+exigua, con lo cual si uno toma en cuenta el margen de error esto puede dar como ganador a una u otra forma y por una diferencia ni siquiera hoy demasiado precisa, por lo cual yo más que hablar de paridad o empate técnico prefiero decir que hay diferencias que no permiten pronosticar un ganador».

«Lavagna no creo que supere los dos dígitos, incluso dudo que llegue a los dos dígitos».

«Más que un voto vergüenza, hay un voto de electores con identificación partidaria negativa. Es decir son aquellos que te dicen «ni loco votaría a Cristina» o «ni loco votaría a Macri», pero que están ahí y no terminan de decidir a quién van a votar. De alguna manera uno está esperando a ver cuál odio supera al otro. Pero creo que esto va a jugar más en la instancia de primera vuelta, donde probablemente va a empezar a operar el voto útil».

Gustavo Marangoni (M&R)

«En las PASO 2015 los votos de las dos fórmulas más votadas totalizaron el 68,8% (38,7% FPV y 30,1% Cambiemos). En la actualidad, los estudios de opinión señalan un rango entre ambas fuerzas sumadas entre 75% y 81%. Hay polarización. Respecto de las posiciones, hay coincidencia entre las encuestas de una ventaja para la fórmula FF pero con un crecimiento del binomio Macri-Pichetto en las últimas semanas».

«Quedan tres semanas de campaña. Debieran darse circunstancias muy excepcionales para que se registren sorpresas en cuanto a las distancia entre el primero y el segundo (entendiendo por esto una ventaja que se acerque a los dos dígitos) o un crecimiento de Lavagna (que se acerque a la performance de Massa 2015, 20 puntos). Quizás la performance de Espert pueda ser una sorpresa en límites acotados pero compitiendo por el tercer lugar en distritos importantes».

«Siempre hay un margen de voto vergonzante. Más en circunstancias como las actuales, donde los principales referentes de ambas fuerzas generan adhesiones firmes y rechazos altos. Hay que considerar también que en las PASO la cantidad de votantes suele ser inferior que en la primera vuelta. En 2015 la diferencia de octubre vs agosto fue de 2 millones de votos. El porcentaje del padrón que vote el 11/8 será dato clave a observar. También el de las fuerzas que no alcancen el 1,5 de los votos válidos. Allí deberán enfocarse las estrategias para sumar voluntades».

Raúl Timerman (Grupo de Opinión Pública-GOP)

«El escenario está fuertemente polarizado, relativamente parejo, con una pequeña ventaja para Alberto frente a Macri para las PASO. La tendencia hasta este momento ha sido achicar la distancia por parte de Macri. Y como faltan varios días para las elecciones, puede ser que ese proceso siga o puede ser, por otro lado, que Alberto empiece a conseguir los votos ‘pan peronistas, no kirchneristas’ necesarios para ganar».

«No creo que haya sorpresa o la distancia sea inesperada. Recordemos que las PASO de 2015 la distancia entre el FpV y Cambiemos fue de 8 puntos, 38 a 30, que después se achicó en la general a 37-34. O sea que 8 puntos no es una distancia inesperada y es la más alta que visualizo que se puede dar. Daría la impresión que por el límite inferior estaría alrededor de los 3 puntos, con un promedio de 5».

«Lavagna tampoco se visualiza que pueda llegar a algún número sorpresivo en las PASO. Sorpresa sería 15, 16 puntos en la elección y no creo que se alcance ese número».

«Siempre en las encuestas existe un voto vergüenza, alguien que no expresa el voto y permanece dentro del grupo de ‘no sabe, no contesta’. Si Cristina sigue siendo la figura predominante dentro de la fórmula de los Fernández es posible que se llegue a una situación de balotaje y ese balotaje sea una situación de descarte».

Jorge Giacobbe (Giacobbe & Asociados)

«El nivel de polarización es enorme y ya venía construido incluso antes de las candidaturas. Digamos que no importaba cuáles fueran las candidaturas, sino que cualquier candidatura de un lado iba a ser Macri y cualquier candidatura del lado de Cristina iba a significar Cristina, con sus sujetos tácitos o sus sujetos explícitos».

«Nosotros tenemos en la última encuesta 3 puntos de diferencia a favor de Alberto y de Cristina para esa elección. Ahora el asterisco es el siguiente: esa encuesta registra 1,4 de gente que dice que no va a ir a votar, es decir de ausentismo. ¿Qué pasó? El ausentismo en 2015 fue superior y yo no veo por qué más gente iría a votar en la PASO. Entonces, si la encuesta no me permite como instrumento registrar cuál es el verdadero ausentismo y la realidad tiende más a 6 que a 1,4, ahí puede haber una sorpresa e impactar en el voto de Macri: es decir, que esa distancia de 3 puntos sea un poco más más parecida a la del 15 (8 puntos en las PASO».

«Nosotros en esta última encuesta de las PASO lo tenemos a Espert arriba 3 puntos de Lavagna, pero en números tan pequeños el margen de error impacta tanto que tranquilamente puede quedar Lavagna un punto arriba».

«Respecto al voto vergüenza, en realidad ya está votando con vergüenza la mayor parte del electorado argentino, porque la visión que hay de todos los candidatos es fantasmagórica. Nosotros hacemos un ejercicio donde le pedimos a la gente que nos defina a cada candidato con una palabra: para definir a Cristina la palabra (que predomina) es ‘corrupta’. Para Macri, es ‘inútil’. Para Alberto, es ‘panqueque’. Y para Pichetto, es ‘traidor’. Entonces los argentinos tienen que ir a elegir entre una corrupta que va con un panqueque y un inútil que va con un traidor».

Gustavo Córdoba (Gustavo Córdoba & Asociados)

«No existe hoy una polarización tan extrema, de paridad total, entre Macri y Alberto Fernández. En nuestros números vemos una diferencia estable en torno a los 7 puntos y medio, con un Alberto en 40 puntos y Macri en 32%/33%. Por eso, vemos un escenario de polarización atenuada por la presencia de Roberto Lavagna y José Luis Espert, que ambos -al menos en nuestros números- suman 18 o 19 puntos, y tomando encuestas de otros colegas tienen un piso mínimo de 12 o 13 puntos. Es decir que este perfil de votante de Espert y de Lavagna es el que le está impidiendo a Macri poder acceder a un escenario de polarización total».

«El Gobierno sabe que no es competitivo en primera vuelta, es más competitivo en segunda y por eso necesita adelantar los climas de opinión electoral de segunda vuelta a primera y de primera a las PASO, de tal manera de convencer a estos votantes de Lavagna y Espert que no deberían desperdiciar sus votos en octubre, que cumplan con sus candidatos en las PASO y que en octubre para definir voten a Macri».

«Ahora, no hay ninguna garantía que esa híper polarización que está proponiendo Macri solamente beneficie a Macri. puede ocurrir que beneficie a Alberto: de los dos, para mí, es el que está más cerca de llegar al 45%».

Facundo Nejamkis (Opina Argentina)

«El escenario de polarización comenzó a configurarse en el 2017. Desde entonces hay dos fuerzas políticas que aún en sus peores momentos no perdieron un piso de intención de voto cercana a 30%. Esto también explica la falta de expectativa que generan las terceras o cuartas fuerzas. Quienes rechazan al Gobierno asumen que el Frente de Todos es la única alternativa para ponerle un freno y –paralelamente– quienes se oponen a que vuelva el kirchnerismo, creen que apoyar al Gobierno es la mejor manera de evitarlo. A tal punto la polarización está creciendo que no podemos descartar que, dependiendo del resultado de las PASO, pueda llegar a definirse la elección en la primera vuelta de octubre».

«Si hubiera sorpresas, que por su condición es imposible prever, tendemos a inclinarnos a que podrían venir más por quien será primero o segundo o por la distancia entre ambos, que por las terceras fuerzas».

«Siempre puede haber un componente de voto vergonzante. La cuestión en esta elección es que en relación a los dos campos políticos principales podrían existir diversas razones para ocultar el voto. A la hora de analizar una encuesta, por ejemplo, siempre es pertinente poner el ojo en ese porcentaje que dice que está indeciso o incluso que votará en blanco».

Federico González  (Federico González & Asociados)

«Coincido en que el escenario está polarizado, pero no híper polarizado ni ultra polarizado, aunque pueda estarlo a futuro. De acuerdo a nuestros números, el coeficiente de polarización actual para un escenario de PASO ascendería a 71% sin proyectar indecisos y a 77,8% proyectándolos. A nivel nacional, proyectando indecisos, los números que actualmente manejamos son: 41,9% para la fórmula Fernández-Fernández, versus 35,8% para Macri-Pichetto (con un nivel de error de +/- 2.7%)».

«Calificaría a la diferencia de 6,1% a favor del Frente de Todos como una diferencia significativa pero no concluyente. A nivel provincial, en cambio, nuestra diferencia de 3.2% a favor de Kicillof (39,8%) respecto de María Eugenia Vidal (36,6%) sí se ubica más en una zona de relativa paridad».

«Creo que la mayor incertidumbre y volatilidad podría estar más en la distancia y/u orden entre primero y segundo que en una eventual subida del tercero (un Lavagna en 15 puntos, por ejemplo)».

«Considero también que, en términos de sorpresas menores, podría también ocurrir que José Luis Espert termine más cerca de Lavagna que lo que hoy se viene proyectando».

«El voto vergüenza es un fenómeno que puede presentarse cuando existen razones de época que lo propician. En tal sentido, la grieta ideológica es tanto una ocasión para la existencia de un voto declamado con pasión militante como para un voto tímido que tiende a esconderse ante el peso de miradas descalificadoras, reales o imaginarias. Es una posibilidad que debe tenerse en cuenta. Más entre votantes que finalmente terminen inclinándose por Macri-Pichetto».

Martín Romeo (SOLO Comunicación)

«El escenario tiende a la polarización tanto en la agenda de opinión pública como en la agenda de los medios. Se produce un círculo vicioso en el que la agenda mediática muestra mayoritariamente las acciones y actividades de los candidatos con mayor intención de voto que reciben más publicidad y visibilidad y potencian en el electorado la tensión de elegir entre alguno de ellos como resultado de la menor aparición de las restantes opciones electorales».

«Los análisis, generalmente, se hacen bajo las condiciones actuales de la coyuntura y sugieren que no debería haber ninguna ‘sorpresa’ o, técnicamente, ninguna fuerza ubicada por fuera del margen de error de su estimación. Es imposible estimar qué podría suceder ante la aparición de eventos extraordinarios que pueden ir desde una catástrofe hasta una muerte, un escándalo de corrupción o violencia, una feroz corrida cambiaria».

«El escenario de fuerte polarización reduce a la mínima expresión otras opciones y va estrangulando a los indecisos. En consecuencia, no se observa un ocultamiento de la intención de voto».

Martha Reale (Reale Dallatorre Consultores – RDT)

«Se ingresó en una fase de polarización aguda y con una paridad inédita si se considera el escenario para una eventual segunda vuelta. No obstante, en virtud de la dinámica que registran los índices de intención de voto, hoy suena factible que dicho contexto pueda cristalizarse en las generales de octubre».

«No observamos la posibilidad de un ‘batacazo’ por parte de alguno de los candidatos de la tercera vía. Sí verificamos un escenario de mayor incertidumbre respecto a la diferencia entre las fuerzas mayoritarias. Principalmente, porque resulta muy dificultoso dilucidar el comportamiento que tendrá el elector bonaerense en el cuarto oscuro y cómo ello impactará en la distancia entre ambos espacios».

«La gobernadora Vidal tiene chances de imponerse ante su principal rival, Axel Kicillof. Pero hasta el momento dicha posibilidad pende de la concreción de un porcentaje de corte de boleta, en su favor. todas las hipótesis deben considerarse a partir de los vigorosos cambios de humor social, registrados en el último bimestre. María Eugenia Vidal está en condiciones de impulsar la fórmula Macri-Pichetto, pero también de perecer producto de la tracción impuesta por la fórmula Fernández-Fernández. Cualquiera de los postulados anteriormente mencionados, tendrá necesariamente un efecto en la distancia entre una fórmula presidencial y la otra».

«En la actualidad alrededor de un 25% de los electores de la tercera vía afirma que podría modificar su voto de cara a las PASO, ante la amenaza de una victoria del kirchnerismo. Dicho sector estaría dispuesto a canjear desencanto por pragmatismo. Sólo resta saber en qué medida lo ejecutará».

Pablo Romá (Circuitos) 

«El escenario tiende cada vez más a la polarización, fundamentalmente porque se ponen en juego dos propuestas de país con características antagónicas y vemos que al resto de las fuerzas les está costando generar una propuesta alternativa que pueda desacoplar lo que hoy representan Juntos para el Cambio y el Frente de Todos».

«En términos de intención de votos, observamos que Alberto Fernández tiene una ventaja de alrededor de 8 puntos sobre Mauricio Macri en la provincia de Buenos Aires».

«Es muy significativa la presencia de Sergio Massa acompañando a Alberto Fernández en la campaña, indica que la ventaja hoy no es decisiva y aparece como necesidad tratar de ganar el voto de sectores que no eran afines al kirchnerismo».

«En esta instancia de PASO, no vemos mucha margen para sorpresas pero queda por ver el comportamiento de los indecisos».

Facundo Mordasini (Consultora de Imagen y Gestión Política (CIGP)

«La última medición que realizamos continúa indicando un escenario polarizado entre Alberto Fernandez y Mauricio Macri».

«Los números reflejan una leve ventaja para los Fernández, pero debemos tener en cuenta que la diferencia entre estas está en 3,4%, enmarcándose en lo que se denomina un empate técnico».

«Por el momento la tercera fuerza encabezada por Lavagna no estaría superando los 7,5% de intención de voto».

«Por el momento no observamos la posibilidad de que haya un voto oculto que se dirija hacia otras fuerzas que no sean las principales. Lo que sí se puede considerar es que parte de los votantes de Consenso Federal, y al mismo tiempo la mayoría de los que eligen a José Luis Espert, tienen un perfil más cercano a los votantes de la coalición Juntos por el Cambio. Esto nos permite pensar que si Alberto Fernandez no logra ganar en primera vuelta muchos de estos electores elegirán durante el balotaje al actual presidente Macri».

Sebastián Lopes Perera (Marketing & Estadística)

«Sobre la base de nuestras encuestas, la elección está polarizada. Entre Alberto y Macri concentran casi el 75% de los votos. Respecto al resultado entre ambos, tenemos una diferencia proyectada del orden de los 5 a 7 puntos entre el primero y el segundo, a favor de Alberto F., distancia que en los últimos 3 meses se viene acortando; y de acá a las PASO tal vez siga la misma tendencia de acercamiento».

«Los cambios más significativos que se observan son que la imagen del presidente mejora y comenzó a trasladarse al voto, y que hay una caída en la intención de voto a Lavagna. Fernández está estable y lo mismo notamos con Espert».

«No parecería haber una conducta sistemática de ocultar las opiniones por vergüenza o rechazo a los candidatos; nosotros usamos una metodología multiplataforma online que permite al encuestado tener mucha libertad al responder, tal vez eso ayude a que podamos tener una baja proporción de gente que no responde esas preguntas».