Mientras la Municipalidad de Concordia lleva adelante la Consulta Popular para definir el futuro uso del Hostal del Río, quien recordó los comienzos y parte de la historia del mismo fue Ignacio Lapiduz, empresario de nuestra ciudad. En la década del ’70 se transformó en el primer concesionario del lugar que con el paso de los años se convirtió en un ícono de la noche argentina.

“Recuerdo que una de las hijas del Coronel (Rafael) Tiscornia, entonces intendente de la ciudad, le envía una fotografía de un viaje a Europa de un hostal con confitería a la orilla del río y fue así que pensó en hacer algo similar en Concordia, dando comienzo al proyecto” recuerda en sus primeras palabras Lapiduz, dando en su relato infinidades de detalles que a cualquier persona la ubica en tiempo y espacio.

Al ponerse en marcha, “presentó una idea de hacer una confitería, salón de té y a la noche, una confitería bailable” y por esas cosas del destino “me encuentro en la ciudad con el arquitecto que creó Keops en Córdoba, Tony Taborda, quien fue el que diseñó finalmente al Hostal del Río” señaló Lapiduz. La inauguración fue en julio de 1971.

Rápidamente se convirtió en un ícono de la noche argentina, estando a la misma altura de boliches como el reconocido Mau Mau, llegando inclusive a ser tapa de la Revista Gente. “Fue una época de oro” rememora quien supo tener a figuras como Héctor Cavallero, Susana Giménez o la modelo “Chunchuna” Villafañe, Carlos Monzón o músicos de la talla de Los Plateros, Roberto Goyeneche, Piero o el Trío Galleta.

El sitio era seleccionado también por la plana política. El ex gobernador Enrique Tomás Cresto era uno de los que elegía al Hostal del Río como sitio de recepción a funcionarios nacionales o figuras políticas relevantes que llegaban a la ciudad. También se hacían casamientos, recepciones, cumpleaños de quince, entre otras fiestas y eventos.

“Hostal fue como una cédula de identidad de la ciudad de Concordia” remarca hoy Lapiduz, primer concesionario del local que permanecía abierto de martes a domingos, siempre con grandes convocatorias. “Hostal era tan lindo de día como de noche, por su decoración y ambientación, era espectacular. Almorzar con la vista al río con esos ventanales era formidable”.

A modo de anécdota, el empresario cuenta que “en esa época se estilaba tomar whisky, y cada uno tenía en el boliche su botella con su nombre. Llegamos a tener 275 botellas de whisky, reservadas para cuando concurrían a la confitería”.

El nombre Hostal del Río fue puesto desde su inauguración y nunca cambiado, conservó siempre el nombre, como así también la fachada. Una marca registrada para la ciudad y es por ello que desde la gestión del intendente Enrique Cresto, tras recuperar el lugar a manos del municipio, se lleva adelante este proceso de Consulta Ciudadana que en días más tendrá su definición gracias a que la comunidad está decidiendo cuál será el uso del lugar, ubicado en un entorno natural, histórico y educativo reconocido en el mundo entero.

Para participar de la consulta ciudadana, hay que ingresar al sitio web oficial de la Municipalidad de Concordia en www.concordia.gob.ar