22 agosto, 2017 16:15
«Queremos ser justos con los que van a trabajar todos los días», confirmó Panozzo. Agmer repudió el sistema de control: «Es la antesala para instalar el presentismo», denunció el sindicato docente.
«Estamos en condiciones de comenzar a instalar los primeros 100 relojes faciales, porque ya contamos con el pedido de varios directores», confirmó José Luis Panozzo, titular del Consejo General de Educación.
«A partir de mañana (por este miércoles) previa capacitación a quienes los van a utilizar, comenzaremos por las escuelas más grandes de la provincia, hasta llegar con el equipamiento, a todas las escuelas. Esto se hará en forma progresiva», indicó.
Cuando se le consultó a Panozzo qué aducen los directivos para hacer el pedido para controlar a los docentes, éste apuntó a la «carga de asistencia y los inconvenientes permanentes de aquellos docentes que no asisten o que llegan fuera de su horario, por los que incluso han llegado a abrirse sumarios administrativos».
«Será el docente el que tenga que registrarse y ya no expondrá al directivo en esta puja permanente y diaria que tienen», justificó el titular del CGE, al remarcar también que «con la implementación de esta nueva tecnología, se elimina la carga de la asistencia en los cuadernos de registros de firma».
Panozzo remarcó que el sistema de relojes faciales, «no es un control», sino que según aclaró: «Queremos ser justos con los que van a trabajar todos los días, que son la mayoría de los docentes de las escuelas públicas de la provincia que cumplen con sus horarios y su trabajo».
«Ese docente no tendrá ningún inconveniente, porque en vez de pasar por la Secretaría para firmar el cuaderno de asistencia, se registran en el reloj facial, y de forma online, en el CGE tenemos la información en el momento», subrayó.
El rechazo de Agmer al sistema de control facial
La Comisión Directiva Central de AGMER, a través de un comunicado, repudió las declaraciones del presidente del CGE, José Luis Panozzo, por el anuncio de la implementación de un sistema de reconocimiento facial para controlar la asistencia de los docentes.
A continuación, el comunicado textual:
Desde AGMER creemos que existe sólo una lógica disciplinadora y persecutoria detrás de la pretendida instrumentación del nuevo sistema que se intenta disfrazar bajo dos falacias: por un lado que se resolverán mágicamente los problemas de liquidaciones, para los cuales han demostrado una clara incapacidad; y por el otro que evitará el ausentismo docente. El nuevo sistema es la antesala para instalar el presentismo, que es impulsado en todo el país por el Ministerio de Educación de la Nación.
Preocupa que el presidente del organismo en el que se produce la política educativa de la provincia de Entre Ríos realice un planteo tan reaccionario y reduccionista de problemáticas complejas que se deben abordar desde la mejora de las condiciones de trabajo y del cuidado de la salud laboral de los docentes.
Finalmente repudiamos la chicana -un práctica reiterada y lamentable del presidente del organismo- en las que hace referencia a las diferencias internas en el sindicato, a la que respondemos con nuestro ejemplo de voluntad permanente por la unidad; de la misma forma que pretender deslegitimar nuestro rechazo con el argumento de que en AGMER Central existe el mismo sistema, primero porque es falso (desde hace 8 años hay un sistema digital), pero además es inadmisible en tanto y en cuanto no es comparable cómo se organiza el trabajo en oficinas administrativas con el de las escuelas. El trabajo docente se mueve en otros tiempos y en otra dinámica institucional que son propias de cada institución. Panozzo vuelve a exponer aquí su concepción pequeña, regresiva y tecnócrata, en línea con las políticas educativas nacionales, que promueven el presentismo, al pensar el trabajo docente como una tarea administrativa que sólo funciona bien si se la vigila y castiga.
Fuente: El Once.