El ex Procurador del Tesoro Carlos Balbín le había planteado al ministro del Interior que se debía iniciar un juicio por lesividad contra el magnate inglés, amigo del presidente Macri, por la compra de las 11 mil hectáreas que incluyen al lago Escondido. Frigerio lo desechó, a Balbín lo renunciaron y ahora el senador Fernando «Pino» Solanas denunció al ministro.
El ministerio del Interior desechó un pedido del ex procurador del Tesoro, Carlos Balbín, para que el Estado le iniciara al magnate británico Joe Lewis un juicio por “lesividad” en la adquisición de 11 mil hectáreas en la Patagonia, que incluyen al Lago Escondido, cuyo acceso está vedado por la empresa.
Así lo denunciaron el senador nacional Fernando “Pino Solanas” junto al abogado ambientalista Enrique Viale y el investigador Alejandro Olmos Gaona, quienes acusaron a ministro del Interior, Rogelio Frigerio, de “abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público”. La denuncia quedó radicada en el Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal Número 8 a cargo del juez Marcelo Martinez de Giorgi y la Fiscalía Número 4, encabezada por Carlos Stornelli.
Según relataron los denunciantes, el año pasado la Procuración del Tesoro de la Nación, a cargo entonces de Balbín, le pidió al Ministerio del Interior que se iniciara una acción judicial de “lesividad” contra la empresa Hidden Lake S.A., una sociedad británica cuyo accionista mayoritario es el magnate Joe Lewis, el amigo del presidente Mauricio Macri. Sin embargo, el Ministerio contestó que, como la acción penal contra Lewis por fraude en la compra de las viviendas está prescripta, no tenía sentido pedir la nulidad de ese acto porque significaba “un dispendio jurisdiccional inútil”.
Balbín fue desplazado de la Procuración en abril de este año, luego de que firmara un crítico dictamen que afectaba directamente a la familia Macri en el caso de la condonación de la deuda por la concesión del Correo Argentino. “Ahora relacionamos también la decisión de no ir contra Lewis con su salida”, dijo a Página/12 Enrique Viale.
Lewis estaba acusado de adquirir las 11 mil hectáreas de manera fraudulenta, a través de una maniobra con accionistas argentinos que simularon una compra para luego cederle las tierras al magnate, algo que está prohibido por las disposiciones del Decreto 15.385/44 ratificado por la ley 12.913. En efecto, la autorización efectuada por la Comisión Nacional de Zonas de frontera en 1996 se extendió a H.R. Properties Buenos Aires S.A, integrada por argentinos, pero luego la compañía se transformó en Hidden Lake, integrada totalmente por accionistas británicos. Esa maniobra permitió la adquisición de la estancia en una zona de frontera, vedada a extranjeros.
Si bien el fraude fue probado por la Procuración de Investigaciones Administrativas, debido al paso del tiempo todos los involucrados –incluyendo a Lewis- fueron sobreseídos por prescripción de la acción penal, en un fallo firmado por la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal, el 30 de marzo.
Un año antes, Macri había llegado a esa propiedad en un helicóptero de la flota de su amigo inglés. Pocos días después, el Gobierno avanzó con los tarifazos en los servicios energéticos, que benefician al empresariado del rubro en general y a Lewis en particular, ya que es uno de los principales accionistas de Edenor. No fue el único regalo del Presidente: también hubo una condonación de deudas de las energéticas, vía decreto, que significaron para la compañía de Lewis un achique de 1129 millones de pesos de su pasivo.
“La respuesta del Ministerio del Interior es inadmisible, la defensa de los intereses nacionales es un deber de los funcionarios públicos, no se puede considerar como un gasto de energía inútil”, remarcó Viale.
Mientras tanto, Lewis se encarga de demostrar cotidianamente su falta de apego a la ley y continúa sin permitir el acceso público al Lago Escondido, a pesar de que hay una sentencia firme del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro que le ordenó que abriera un camino para cumplir con el mandato constitucional.