14 septiembre, 2018 10:04



Cierra concesionaria de motos con más de 35 años de trayectoria.

“Llegó un momento en que debemos decidir vendemos y salvamos el capital que tenemos o corremos el riesgo de perder todo, no tenemos deudas en bancos por eso estamos liquidando al costo”, dijo la responsable del negocio.

fracalossi motos

Después de 35 años de trayectoria comercial ininterrumpida otra empresa familiar cierra sus puertas en Concordia. Se trata de “Fracalossi motos”.

Lamentablemente «la crisis nos afecta a todos, a todos nos llega, nos superan los gastos, nos superan los impuestos y no nos queda otra. Perdemos lo que nos queda o vemos más adelante qué puede pasar en el país. Por lo pronto esto no da para más estamos tratando de salvar el capital que nos queda”, dijo Romina Fracalossi, responsable de la firma.

“Somos tres empleados en blanco, tres familias que recibirán como corresponde la indemnización pero quedamos a la buena de Dios tanto en Concordia como en la mayoría del país no hay fuentes de trabajo”, continuó.

La empresa inició las actividades en 1989 y para la familia Fracalossi es una vida dedicada al trabajo: “yo empecé a los 14 años a trabajar y para nosotros es todo una vida vemos como nos podemos reconvertir tratando de salvar la situación lo mejor posible”.

Romina comunicó que los vecinos de la ciudad tienen la oportunidad en estos días de poder adquirir a buen precio un moto-vehículo. “La gente tiene la oportunidad porque estamos liquidando todo, tenemos financiación de la misma manera que venimos trabajando”, resaltó.

Contó además que en el rubro no hay reglas claras en el país. “Un concesionario oficial de motos hoy en día no puede subsistir únicamente de esto, hoy una moto la venden en cualquier lugar cuando para nosotros hay un millón de exigencias, pero cualquier casa de electrodomésticos te vende una moto”, remarcó.

La empresa ha trabajado durante estos años con marcas de industria nacional para apoyar el trabajo argentino. “Más allá que algunos productos vienen del exterior, el gobierno exigió plantas de ensamblajes armadas en el país y esto genera mano de obra ahora se rompe un eslabón de esta cadena con nosotros las fabricas están haciendo despidos a dos manos y en nuestro caso aguantamos hasta donde pudimos”, detalló.

La situación era previsible pero la familia tenía la esperanza de seguir. “Llegó un momento en que debemos decidir vendemos y salvamos el capital que tenemos o tenemos el riesgo de perder todo, no tenemos deudas en bancos por eso estamos liquidando al costo”, concluyó.

Fuente: El Sol.