En la mañana de este lunes feriado la dueña del kiosco ubicado en la esquina de la plaza La Bianca volvió a sufrir la visita de lo amigo de lo ajeno. Jésica, una de las hijas de Sara Barboza de Schiebert, de 69 años, dice “el negocio fue robado por segunda vez en una semana, uno de los robos fue el viernes pasado donde robaron un televisor y un montón de mercadería”.

A pesar de que “pusimos refuerzos en las rejas y más candados se arreglaron para entrar de nuevo para robar balanzas y otra vez mercadería que mi mamá compró con su jubilación”, señaló la joven. No sólo robaron sino que también realizaron destrozos en las entrada de luz, un servicio indispensable para trabajar.

Jésica no pudo ocultar su indignación “porque es una señora mayor que quedó viuda hace seis meses y es su sustento”, subrayó.
Además señaló que “estamos a pocas cuadras de la Comisaría y sigue pasando esto, por eso, queremos que se conozca y que alguien responda”.