13 agosto, 2021 15:04
El industrial Carlos Muia compró el 45% de Santista Argentina, principal productor de denim y ropa de trabajo del país. Hace días, adquirió Confecciones Riojanas, una planta cerrada en 2019. Es dueño de cuatro plantas textiles en el norte.
Desde el corazón de la provincia de Catamarca, un industrial argentino se animó en medio de una pandemia a invertir y recuperar marcas emblemáticas para la industria textil nacional y reabrió otra planta textil riojana cerrada en febrero de 2019. El hacedor de estos milagros es Carlos Muia quién compró el 45% de Santista Argentina, compró y reabrió la empresa Confecciones Riojanas ahora rebautizada Confelar. Es dueño de cuatro plantas textiles en el norte argentino y da trabajo a 1675 operarios.
La historia de Santista Argentina, ex Grandes Fábricas Argentinas (Grafa), se remonta a casi un siglo atrás. Fue fundada hace 95 años por el grupo Bunge & Born para industrializar fibras. Luego pasó a manos de Camargo Correa, quién adquirió también la empresa Alpargatas. Más tarde, pasó a manos mexicanas, hasta que en 2020, la compró el grupo brasileño GBPK Inversiones Limitada, propietario también de Santista Brasil. En Argentina, Santista tiene una planta en Famailla, provincia de Tucumán donde trabajan 900 operarios y una oficina en la Ciudad de Buenos Aires. Para dimensionar el poder de Santista, vale decir que es líder en la producción de denim y ropa de indumentaria de trabajo con su marca Ombú, entre otras.
Carlos Muia hace 40 años eligió radicarse en la provincia de Catamarca. Con su empresa Confecat da trabajo a 600 operarios y es el principal empleador privado de la provincia. Hace 11 años que está en Famatina con una planta textil en la que trabajan 100 personas, es el principal empleador de la zona. Abrió una segunda planta en Famatina donde trabajan 40 empleados y se animó hace días a reabrir Confecciones Riojanas, que había cerrado en 2019, dejando a 80 operarios sin trabajo y sin la indemnización. Muia se hizo cargo de todo y les pagó lo adeudado. A la par suya trabaja José Antonio, su hermano. Comprometido con las necesidades de los industriales y empresarios del resto del país, hoy es el actual presidente de la Unión Industrial de Catamarca.
Carlos Muia mantuvo la compra del 45% de Santista Argentina en silencio, pero aceptó hablar con BAE Negocios: “Compro Santista con 66 años, junto con mi hermano, es la inversión más grande de mi vida empresaria. Me da mucha emoción que Grafa vuelva a manos argentinas. La planta de Tucumán produce 2.200.000 metros de tela mensuales, de los cuales 1,2 millones son de jean y gabardina de prendas de vestir y 1 millón es tela de indumentaria para trabajo. Es el mayor productor de telas de jeans del mercado nacional y produce el 80% de la ropa de trabajo que se usa en la Argentina. Santista es dueña de la marca Grafil que produce telas para el sector salud y guardapolvos colegiales. No puedo contar cuanto invertí, tenemos un acuerdo de confidencialidad”.
Desde Confecat, Muia era uno de los nueve licenciatarios que producían prendas bajo la marca Ombú. “Desde Catamarca somos el mayor productor de indumentaria de trabajo con Ombú, proveemos ropa para las grandes empresas y somos el mayor productor de calzado de seguridad en el país. Nuestra segunda generación es dueña de Aire Libre, una marca urbana de sportware y de JL que se dedica a proveer al área de salud de clínicas como el Hospital Alemán, Otamendi, la Clínica Bazterrica, entre otras”, contó en una charla.
“Junto con mi hermano, trabajo desde los 15 años, forjamos nuestro propio destino lejos de las luces. Somos empresarios del interior, no tenemos el brillo de otros empresarios o contactos con los medios, no pagamos notas. Cuando protestamos nuestra caja de resonancia es distinta. Soy amante de la industria nacional, tengo una visión industrial de país federal. Haber recuperado una empresa de tal envergadura es un logro muy importante”, confió.