29 octubre, 2021 14:38
El asesor económico del municipio de Concordia, Álvaro Sierra, repasó los puntos más salientes del Presupuesto 2022. El proyecto fue presentado el jueves a los presidentes de los distintos bloques del Concejo Deliberante.
«Este presupuesto tiene como eje la obra publica, la inversión social y garantiza los gastos operativos necesarios para ir mejorando los servicios públicos», comenzó señalando Sierra.
En diálogo, el contador explicó que durante la sesión del jueves «se hizo la presentación formal de este presupuesto a los presidentes de los distintos bloques del Concejo Deliberante de Concordia».
«Es un presupuesto que, en su importe total, es de 7.900 millones de pesos: un 33% más de lo que fue el de 2021», mencionó. Para su elaboración, «lo fundamental es tomar dos variables como son la inflación y las perspectivas de crecimiento a nivel país», ilustró Sierra.
Según destacó, «seguimos bajando en el porcentaje del gasto en el rubro Personal y es importante mencionarlo porque Concordia – en los dos últimos años – ha dado aumentos de sueldos por encima de la inflación; es decir se ha podido mantener el poder adquisitivo de los salarios que paga el municipio».
Y por otro lado, «que todo el presupuesto no se vaya solo en pagar sueldos: en su momento ese rubro era más del 60% y en este será de un 49%», insistió. Subrayando además que «en concepto de obra pública se dedicarán 1280 millones de pesos; un 16% del presupuesto».
Por último, Sierra mencionó que «prácticamente para Concordia no representa nada el pago de los servicios por deuda», lo que redunda en que se está muy bien posicionado a la hora de poder tomar prestamos; en caso de necesitarlo.
De todas maneras, no prevé «ni la toma de empréstitos», ni tampoco el «aumento de tasas», resaltó. Recordando que ya en el 2021, «cuando se debió actualizar los mínimos, de acuerdo a la inflación, el intendente tomó la decisión de que no se realice».
Tal medida, valoró, «significó una transferencia de recursos desde el sector público al privado y es una forma de bajar la presión fiscal en estos tiempos de pandemia tan complejos desde lo económico y lo social».