Un hecho policial de graves características se produjo en Concordia por el secuestro de una muchacha de 22 años y su beba de sólo 6 meses.
Fuentes policiales señalaron que, en horas del mediodía del lunes, una mujer de 50 años, acudió a la Comisaría Séptima solicitando la localización de sus hijas Érica (22) y Karen (25), así como de su nieta de seis meses, hija de Érica.
La mujer, de nombre Alicia, dijo a los efectivos policiales que las jóvenes se habían retirado del domicilio en las primeras horas de la mañana hacia el hospital Carrillo y no habían regresado hasta entonces, por lo que los funcionarios realizaron averiguaciones, confirmándose que las jóvenes ya no se encontraban en el hospital.
Fue así que en el transcurso de los minutos posteriores, llegó a la dependencia policial la joven de nombre Karen, quien dio información sobre el posible paradero de su hermana y sobrina, ya que esta sospechaba que ambas podrían estar en zona de la Tortuga Alegre donde viviría la ex pareja de Érica.
La situación fue comunicada a las autoridades y se dio intervención personal de Comisaría Quinta, que logró dar con el domicilio en el cual estaría la joven con su hija, donde la Policía intentó hablar el dueño de la casa, un hombre de unos 70 años de edad, a quien se lo consultó por Érica y su hija.
Sorpresivamente este individuo comenzó a insultar al personal policial y sorpresivamente cerró la puerta de la vivienda, instante que desde el interior, se escuchó a una mujer pidiendo auxilio, por lo que los agentes no dudaron un instante e ingresaron rápidamente a la vivienda.
Mientras los uniformados intentaban sacar a la mujer y a su hija, dueño de la casa tomó una escopeta que tenía detrás de la puerta y se inició un forcejeo, pero afortunadamente los policía lograron desarmarlo y detenerlo.
Mientras esto ocurría, entró en escena la ex pareja de la mujer, un joven de 22 años, que también estaba en el interior del domicilio, el que intentó agredir a los funcionarios con una cuchilla, pero no logró su propósito, siendo reducido, sin que hubiera que lamentar heridos.
Luego de los momentos de gran tensión, se realizó el secuestro del arma larga, tras lo cual ambos quedaron detenidos, destacándose que el septuagenario fue imputado por el delito de “Tenencia ilegal de arma de fuego, resistencia y atentado a la autoridad”, en tanto que el joven quedó detenido por el supuesto delito de “Desobediencia judicial, privación ilegítima de la libertad, resistencia y atentado a la autoridad”.