11 marzo, 2022 12:23
El ex barrabrava de River, Alan Schlenker se casó ayer en una cárcel de Rawson, Chubut, donde cumple una condena a prisión perpetua. “Llevo 9 años de detención arbitraria, preso en una cárcel de máxima seguridad, a 1400 km de distancia, en plena pandemia. Pero el amor es más fuerte y, a pesar de todo, pude tener mi ceremonia de casamiento con alegría y en familia”, escribió en Twitter.
Además, en la red social, el exlíder de “Los Borrachos del Tablón” también publicó un video del momento en el finalmente él y su pareja dieron el “sí, quiero” en el civil. Más allá de que hizo público este acontecimiento, no trascendió quién es su flamante esposa. De hecho, el video empieza justo después de que la jueza pronunciara su nombre. “¿Acepta por esposo a Alan Schlenker comprometiéndose a amarlo y honrarlo por el resto de la vida juntos?”, pregunta la funcionaria pública, y la mujer asiente. Entonces, sí, la jueza los declara “unidos en matrimonio”.
Lo que sigue en el video son los festejos: el vals y un “trencito” familiar al ritmo de “Te quiero tanto”, el himno de Sergio Denis, en el que todos -como era de esperar- lucían la camiseta del Millonario.
Junto a su hermano William (condenado a perpetua por el mismo crimen) y a Adrián Rousseau, entre otros, Alan manejó durante años la barra de River Plate. Está en prisión, condenado a 12 años por el homicidio de un dealer y a cadena perpetua por instigar el crimen de Gonzalo Acro, quien fue asesinado de tres balazos cuando salía de un gimnasio en Villa Urquiza en 2007.
En la biografía de su cuenta de Twitter, que -afirma- es administrada por familiares, sostiene que ambas causas fueron “armadas por la mafia” del club. De igual manera, al conversar tiempo atrás con LA NACION afirmó: “Los barras que trabajan para el poder gozan de impunidad absoluta, yo estoy condenado a perpetua”.
Tras el casamiento, sumó a esa biografía su nuevo estado civil: “casado”.
Por diferencias económicas e ideológicas, la barra de River se dividió en dos cuando él aún estaba al frente, y ambas facciones protagonizaron una serie de enfrentamientos que derivaron en la muerte de Acro.
La interna de la hinchada estalló el 11 de febrero de 2007 en la “batalla de los quinchos” del club, en la previa del debut del equipo que dirigía Daniel Passarella ante Lanús. Alan, William y la banda de Palermo se enfrentaron con Rousseau, Acro y la facción de la barra denominada “la oficial”, compuesta por varios empleados del club. Lo que comenzó como una discusión, terminó a los tiros entre los dos bandos, mientras que los socios presentes corrían para escapar.
Luego le siguió la “batalla del playón”, donde ambas bandas se enfrentaron en la entrada del club tras un encuentro con Independiente, y el asesinato de Acro en agosto del mismo año. Según el fallo, este integrante de la barra de River fue víctima de “un deleznable y traicionero ataque efectuado por al menos cuatro personas contra dos a quienes tomaron desprevenidos y por sorpresa”.